domingo, 13 de febrero de 2011

Eligiendo

"El pensamiento reflexivo requiere un espacio mental separado,desde dónde se puedan ver con claridad las ideas, los pensamientos, los hechos o las descripciones ya creadas". Robert Kegan
Casi la mayoría de las veces no nos damos un espacio reflexivo en nuestro diario vivir. Podríamos elegir cosas diferentes si nos detenemos apenas un minuto. Problemas existen y existirán en la medida de que nosotros le demos cabida pero también es cierto que podemos tomar una actitud diferente cuando se presentan: ¿seguimos el camino de la autodestrucción? enojo, depresión, tristeza, desvalorización... que ya conocemos de memoria o articulamos algo diferente?... Por ejemplo: pedir ayuda, intentar ver el conflicto como un desafío para comunicarme de otra manera, para sacar herramientas que han dormido un sueño eterno, tener un chispazo de fe en uno...en Dios, enorgullecerse de la capacidad de respuesta ante las dificultades, pensar que mucha gente en el mundo está sintiendo lo mismo... para no caer en el "especialismo".
Si estamos un escalón más arriba, si miramos con otros ojos, vivimos con conciencia sabremos,
internamente, que la solución está, existe desde el principio porque todo, todo es una ilusión... El mote de "problema" lo pone cada uno, condimentado con artificios de cosecha personal.
Mezclemos de nuevo el mazo, comencemos un nuevo juego y disfrutemos todos de él.


2 comentarios:

  1. Hola,recien estoy conociendote y me interesa mucho tu experiencia,te cuento que hace mucho que estoy en el camino y mi deseo mas profundo es poder dedicarme a pleno en llevar todo el amor yluz a los que se acerquen a mi,trabajo en una empresa la cual me satura y no es lo mio,tengo mi consultorio y me cuesta dedicarle tiempo a pleno,todo por tener que cobrar un sueldo,siento que debo desprenderme pero yo misma me boicoteo,si puedes quisiera que me orientes,soy reikista,muchaS GRACIAS POR TU TIEMPO,TE LO AGRADECERE.
    Soy de Rosario.

    ResponderEliminar
  2. Hola mi querida reikista:
    es tan largo de responder pero seré sintética. Da mucho miedo, casi diría pánico, desprenderse de las cosas: gente, trabajos, casas, vínculos, identidades que hemos creado y que nos cuesta desapegarnos. No te voy a decir "confía" y que te largues a una pileta que uno cree vacía. Creo que cada uno tiene que encontrar el modo, porque no confiamos en que una fuente nos pueda dar o facilitar lo que necesitamos. Yo creo profundamente en el aprendizaje en ese lugar que no te gusta trabajar y que sentís que no es lo tuyo. Creo que hay que empezar por ahí primero. Primero: cómo podés llevar luz a ese sitio que te satura. ¿Cómo podés ser bien utilizada ahí? y luego vendrá lo otro. Si no podés ser luz en un lugar que te da rechazo, dificilmente puedas dar luz luego en tu consultorio a las personas que se acerquen con problemas. Te recomiendo encarecidamente el libro: El Camino del Artista en Acción (para leer y hacer ejercicios), vas a lograr poco a poco, paso a paso, este movimiento y naturalmente se producirá el cambio que deseas. No es escapandote del espanto, tu ego va jugarte una mala pasada cuando estes en el consultorio sin tu trabajo, conozco el paño. Es asisitiéndote en el proceso y no dejarte desvalida por hacer un cambio brusco. Acordate: el ego grita y da órdenes urgentes... escuchate, tomate diariamente un tiempo para escucharte, meditá, respirá, dale un espacio a esa vocecita que te va a decir el camino. Un abrazo amiga

    ResponderEliminar